Por: Liliana López García
Fotos: Cortesía
Century FOX
Mi socio del blog Brillos y
centellas Marco Antonio Angeles Bonfil, alias Patolin, siempre me ha tachado de
“malinchista”. Eso porque mis cantantes, actores, programas de televisión y películas favoritas son extranjeros.
Tiene razón en mucho pero no en todo: al menos en el rubro de la actuación mis favoritos son mexicanos como Damian Alcázar, Daniel Gimenez Cacho, Ana Ofelia Murguía, Angélica
Aragón, Margarita Sanz y Julieta Egurrola. Sin embargo, para mi ellos son excelente actores más no estrellas.
Son reconocidos en nuestro país y quizá un poco en el extranjero pero no
brillan en todas partes como un astro hollywoodense.
Lo anterior viene a
colación porque hace unas semanas el actor estadounidense Ben Stiller visitó la
ciudad de México con el fin de promover ante los medios de comunicación la
película La increíble vida de Walter Mitty la cual llega a las salas
cinematográficas el próximo 25 de diciembre.
Es la tercera
ocasión que veo a Stiller y soy testigo de su sencillez ante la
prensa y el público… En 2005 vino al DF junto a Chris Rock para presentar
Madagascar. Tardó dos horas en recorrer la alfombra roja del Auditorio Nacional donde se presentó dicha cinta para público e invitados especiales por
apapachar a sus fans y tomarse fotos con ellos.
En 2009 y después de
un desafortunado comentario que hizo en Washington sobre la influenza que en
esos momentos atacaba a México, dio la cara a la prensa mexicana para promover Una noche en el museo 2 y
finalmente regresó a la gran metrópoli para presentar La increíble vida de
Walter Mitty y como siempre, cautivó a la prensa por su sencillez.
Eso mismo lo he
visto con Tom Cruise, Brad Pitt, Keanu Reeves, Will Smith, Jack Black, Sean
Pean, Cameron Díaz, Drew Barrymore, Lucy Liu, Naomi Watts, Benicio del Toro, Antonio Banderas y tantos
otros que son verdaderas estrellas que brillan donde sea.
Y aquí es donde sale
a relucir mi malinchismo: a los extranjeros los admiro porque saben entregarse a la gente
que los ha encumbrado a la fama y a la riqueza… perdón pero ningún actor mexicano por muy
bueno que sea se toma la molestia de quitar la cámara a algún fanático para
tomarse una foto con él y eso lo he visto en muchos de los mencionados anteriormente
sobre todo en Tom Cruise quien pese a ser tan criticado es de lo más atento y
carismático que se puedan imaginar.
Caso contrario,
Salma Hayek, Gael García y Diego Luna, que son considerados los actores mexicanos
“internacionales”, salen con la pendejada que de su vida privada no hablan y
huyen de prensa y público haciéndose los interesantes. Por Dios, Salma ha
logrado traspasar fronteras como figura pero no como actriz y de los otros dos,
no han hecho gran cosa para que presuman tanto.
Ante tal situación reconozco mi malinchismo pues admiro más la sencillez de una verdadera estrella que
la mamonería de una estrellita marinera que solo brilla en nuestro firmamento
nacional.
Volviendo a La increíble
vida de Walter Mitty, se las recomiendo mucho. Trata sobre un hombre ordinario
que tiene que fantasear para darle sabor a su vida. El mismo Ben Stiller la dirigió y estoy segura que será un
gran éxito taquillero.